Año: 2014
De la autora #1 del New York Times, Colleen Hoover, una historia apasionante sobre amistad, traición, amor y sobre la encantadora música que inspira a una joven mujer a poner su vida en orden.
A sus veintidós años, Sydney tiene una gran vida: Está en la universidad, tiene un trabajo estable, está enamorada de su maravilloso novio y está viviendo con su mejor amiga, Tori. Pero todo cambia cuando lo descubre engañándola con Tori, y ahora tiene que decidir qué hacer.
Sydney queda cautivada por Ridge Lawson, su misterioso vecino. No puede apartar sus ojos de él o dejar de escucharlo tocar la guitarra todos los días en su balcón. Y hay algo sobre Sydney que Ridge no puede ignorar, tampoco. Cuando su inevitable encuentro ocurre, pronto descubren que se necesitan el uno al otro en más de un sentido…
Este libro
lo tenía planeado como una lectura casual. Una lectura de transición. De esas
que hacen que superes el libro anterior, pero no es lo suficientemente buena
para tener una resaca literaria y poder continuar con otro libro fácilmente.
No me ha dejado una resaca literaria, pero es que me ha gustado lo suficiente para no poder sacármelo de la cabeza. Y nunca creí que me gustaría, ya que he tenido experiencias con libros pocos conocidos que han resultado malos, a mi gusto.
Comencé el libro con una idea de que no me gustaría, de que tal vez lo iba a dejar por la mitad, de que me arrepentiría y comenzaría con otro. Pero no fue así.
No me ha dejado una resaca literaria, pero es que me ha gustado lo suficiente para no poder sacármelo de la cabeza. Y nunca creí que me gustaría, ya que he tenido experiencias con libros pocos conocidos que han resultado malos, a mi gusto.
Comencé el libro con una idea de que no me gustaría, de que tal vez lo iba a dejar por la mitad, de que me arrepentiría y comenzaría con otro. Pero no fue así.
Todos los días,
Sydney salía a su balcón a hacer sus deberes, y escuchar a su vecino tocar la
guitarra. De cierta manera, Sydney queda cautivada, pero inmediatamente rechaza
una idea de atracción hacia este chico, debido a que ella tiene novio: Hunter.
Ridge, el
vecino misterioso de la guitarra, al notar que Sydney esta cantando una de sus canciones
—la cual no tiene letra—, busca la manera de comunicarse con ella y le manda un
mensaje de texto pidiéndole que le pase la letra, todo intrigado. Ella, de mala
gana acepta, pero el queda maravillado por la letra, y le ha propuesto trabajar
con ella escribiendo las letras para su banda, Sound of Cedar, ya que está
pasando por un bloqueo artístico.
Posteriormente,
al Sydney pasar el mal rato con Hunter y Tori al descubrir que la estaban
engañando, decide irse de su apartamento. Ridge, le da alojamiento en el suyo,
compartiendo piso con Warren, el mejor amigo de Ridge, y Bridgette, quien cree
que Sydney es sorda.
Sydney
descubre algo importante sobre Ridge, y estos se ven en la necesidad de
comunicarse a través de mensajes y papeles. Poco a poco, mientras trabajan en
las canciones, van surgiendo sentimientos entre ellos dos, que desde el
principio luchan por controlar y que no pueden estar juntos, pero en asuntos
del corazón no se puede mandar.
Y así van
transcurriendo los días, sabiendo que no podrán estar juntos, pero anhelando
ese “tal vez algún día”.
Normalmente,
leo muy pocos libros el cual el género es romántico, pero una amiga estaba tan
entusiasmada con este libro, me habló de él y le di una oportunidad.
Principalmente, porque los protagonistas escribían canciones, y la música es
algo de mi día a día.
La historia
es narrada tanto por Sydney como por Ridge, lo cual es importante, ya que de
esta manera conocemos la perspectiva de ambos personajes.
En lo
personal, me ha encantado demasiado Ridge. Pienso que hasta he desarrollado un
enamoramiento hacia él. Y sus acciones, la manera en que hace ciertas cosas, su
manera de ser. Me encanta.
Sin embargo, ha pesar de que me ha gustado la historia, y la narración no ha sido tan mala como la he esperado, un punto negativo es que en su mayoría, los diálogos son en formato script -que es la manera en que son escritas los diálogos en una obra- y es debido a la única manera en que Sydney se pudiera comunicar con Ridge.
Algo
completamente genial —y que he descubierto mientras escribía esta reseña—, es
que el libro tiene soudtrack, y que las canciones que Ridge y Sydney
escribieron de verdad existen. Son todas cantadas por Griffin Peterson y me ha
encantado su voz.
Aquí les
dejo la canción de Maybe Someday:
“Es
apasionado, es cómico, es impredecible, te deja con ganas de seguir leyendo
para saber que va a pasar” palabras dichas por esa chica que me ha recomendado
este libro. Y estoy totalmente de acuerdo con ello.
Disfruten la
lectura.
Muy buena reseña, leeré el libro definitivamente ◘.◘ :)
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